Aquí en medio de la Quebrada de Cafayate comienza nuestra incomparable experiencia, en un universo donde el tiempo parece detenido y donde la magia se hace realidad. Nos abriremos paso por medio de un serpenteante camino al resguardo de paredes naturalmente talladas hasta llegar a al mirador natural que nos permite admirar hacia los 4 puntos cardinales las infinitas formaciones y sus increíbles colores.

Una bodega nos abre sus puertas. La Audición del viento, el Olfato y el Gusto, son los agasajados de este momento. Una copa de vino y el alma comienza a despertar con el sabor de pequeñas y calientes empanadas de carne, sumados a la calidez del majestuoso entorno natural, los acompañarán para degustar la gastronomía regional gourmet mediante este exclusivo almuerzo campestre a cielo abierto.

Una caminata de baja intensidad con una duración de  2 horas y medias por un laberinto de formaciones  increíbles que han sido talladas en la piedra por el viento y el agua. Nadie que haya  pasado por aquí olvidará jamás esta tierra que de un momento a otro se enciende y enrojece.